La vida, el universo y todo lo demás – Douglas Adams

vidaEn La vida, el universo y todo lo demás prosiguen las cósmicas y cómicas aventuras iniciadas en la Guía del autoestopista galáctico y El restaurante del fin del mundo, la universalmente aclamada «trilogía en cinco partes» cuyos volúmenes (no nos cansaremos de repetirlo) pueden leerse de forma independiente, y que tuvo su continuación en Hasta luego, y gracias por el pescado Informe sobre la Tierra: fundamentalmente inofensiva. En este libro encontramos a intrépidos y conocidos personajes: Arthur Dent, el único humano que sobrevivió a la demolición de la tierra; Marvin, el androide paranoide, el más depresivo robot de la historia de la literatura; Zaphod Debleebrox, antiguo Presidente de la Galaxia y un tipo muy presentable, a quien le ocurre tener dos cabezas. Y así.

Debe ser de los pocos libros donde la sinopsis no dice absolutamente nada acerca de qué va el libro, pero si nos hemos leído los 2 primeros libros de la serie sabremos que nos vamos a encontrar una historia surreal, paranoica y con situaciones de lo más dispar y extrañas posibles.

En este caso, la historia comienza donde acaba el segundo libro, pero rápidamente se encauza por otros derroteros. A pesar de tener varios hilos (algunos un tanto raros y que no encajan demasiado bien en la historia), la trama principal se centra en la guerra contra una especie (los Krikkit) cuya única meta en la vida, al descubrir que no estaban solos, es la de aniquilar cualquier especie viva en el universo.

En este libro se pierde bastante del fino y delirante humor de los libros anteriores, aunque siempre está presente de alguna forma, y se enreda un poco con situaciones que cortan demasiado bruscamente el desarrollo normal de la historia. Algunas situaciones alocadas no son bien insertadas dando una sensación de desbarajuste a lo largo del libro.

A pesar de que se pierde bastante de la chispa que caracteriza a esta saga, nos encontramos con una trama bastante decente, donde hubiera servido muy bien para un libro más serio y desarrollado, pero que al incluirla en un libro con un humor tan característico, no se la aprovecha tan bien como debiera ser.

Lo malo que voy viendo de esta saga es que hay situaciones que pensaba que se irían cerrando o desarrollando en libros posteriores pero creo que no es así. Se hace un continuo intento de establecer situaciones cómicas e hilarantes, que si bien son de agradecer y realmente nos agradan, quedan un poco en tierra de nadie. Por ejemplo, en el segundo libro de la serie comentaba que Zaphod parecía tener un papel importante dentro de alguna trama más compleja y que se intuía claramente, pero en este tercer libro no aparece por ningún sitio tal característica ni se hace alusión a tal hecho. Por ello hay veces que, en especial en este libro, tenemos una pequeña sensación de batiburrillo sin sentido.

Los personajes siguen más o menos la misma tónica general de desarrollo, con un gran robot paranoide y depresivo y con un pequeño intento de dar protagonismo a la chica terrícola, de la cual sigo sin entender su aparición en esta saga.

Mi nota: 5/10. Resumiendo, un libro ameno que continúa en la línea humorística y absurda de los anteriores, pero que no nos deja ni de lejos las mismas sensaciones.

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